17 jul 2011

Ella



Ella mira por su ventana mientras las gotas de lluvia resbalan por la parte exterior del cristal. Suspira, y al hacerlo empaña el frío vidrio que la separa del exterior. -Esta noche no se sale- piensa, pero se da cuenta, una vez más, de que tampoco tendría dónde ir.

Cree que su vida es un desastre, y culpa a todos a su alrededor, culpa a su familia, a sus amigos, a los estudios, a su trabajo, a la sociedad, pero sobre todo se culpa a sí misma.

Se levanta de la cama y se mira al espejo, hace tiempo que no se siente guapa, desde que su novio la abandonó por otra mejor, aunque ahora no le da tanta importancia al aspecto. Lo que no sabe es que sigue siendo guapa, y que su alma es aún mas hermosa desde que lo olvidó.

Se sienta delante de la mesa, hay una hoja de papel rota y un bolígrafo, el cual coge para hacer un dibujo en el papel, pero no sabe qué dibujar.

Está segura de que la suerte la abandonó y que ahora está sola, pero la realidad es que sólo la ha dejado por un tiempo, para que aprenda, para que no cuente con su ayuda como siempre hacía, y efectivamente aprendió.

-¡Ella, la cena está lista!- le avisa su madre. -¡Bajo enseguida!- Respondió Ella, y con el bolígrafo, escribió cuatro letras en cuatro dedos de su mano izquierda, se levantó de la silla, y salió de su habitación.

No hay comentarios:

Publicar un comentario